Descubre el panorama de las fuentes de EPA y DHA y los alimentos ricos en omega-3 con una mirada clara a las fuentes de EPA y DHA. EPA y DHA son dos grasas omega-3 que se encuentran en una variedad de alimentos y productos, incluyendo algunas opciones derivadas de algas. Esta página desglosa las principales categorías de fuentes de EPA y DHA—alimentos marinos, opciones de origen algal y productos fortificados—para que puedas identificar opciones confiables para la ingesta diaria. Muchas fuentes clásicas de EPA y DHA provienen de mariscos. Pescados grasos como el salmón, las sardinas, la caballa, el arenque y la trucha son ejemplos comunes, mientras que el krill y ciertos mariscos también contribuyen. Para opciones no animales, los aceites derivados de algas proporcionan EPA y DHA, disponibles en forma líquida, cápsulas o incorporados en alimentos. Los productos fortificados, incluyendo huevos enriquecidos con EPA y DHA y lácteos o bebidas vegetales enriquecidas, también cuentan como fuentes de EPA y DHA. Para poner estas opciones en práctica, considera ideas rápidas y sabrosas que incluyen fuentes de EPA y DHA. Prueba sardinas en conserva en tostadas con pimienta y limón; hornea un filete de salmón con hierbas; bate un chorrito de aceite de alga en un aderezo para ensaladas o rocíalo sobre verduras; elige huevos o productos lácteos etiquetados con enriquecimiento en EPA y DHA; o explora formatos de suplementos a base de algas como parte de tu rutina. Sigue leyendo para aprender más sobre las fuentes de EPA y DHA y cómo identificarlas en las etiquetas de los productos, además de opciones prácticas y sabrosas para aumentar tu ingesta diaria—lee ahora.