¿Cómo funcionan las cápsulas liposomales se entiende mejor comenzando por su arquitectura central? Las cápsulas liposomales son vesículas a escala nanométrica que se forman cuando los fosfolípidos se ensamblan espontáneamente en una bicapa, creando una capa esférica con un interior acuoso. La envoltura lipídica proporciona un límite definido y un ambiente interior distinto que puede acomodar una variedad de cargas, mientras que la superficie exterior puede ser ajustada para mayor estabilidad y compatibilidad con diferentes medios. En esta guía respaldada por la ciencia, exploramos los elementos estructurales que sustentan el comportamiento de estos transportadores al navegar en diferentes entornos. Las propiedades de encapsulación son fundamentales para cómo funcionan las cápsulas liposomales. Las cargas pueden residir en el núcleo acuoso si son hidrofílicas, o embedidas dentro de la bicapa lipídica si son hidrofóbicas. La composición de la capa lipídica, que a menudo incluye colesterol, influye en la fluidez y estabilidad de la membrana. Las características de la superficie, como la carga superficial o la adición de polímeros como el polietilenglicol (PEG), pueden alterar las interacciones con los medios circundantes y ayudar a definir el comportamiento del vesículo en diferentes condiciones. Cuando las cápsulas liposomales interactúan con contextos biológicos, entran en juego varios mecanismos generales. La ruta de absorción más común para los vesículos es la endocitosis, un proceso por el cual las células internalizan materiales externos dentro de vesículas. Dentro de los endosomas, cambios en el pH o la actividad enzimática pueden afectar la integridad del liposoma y promover la liberación del contenido encapsulado. Algunas formulaciones lipídicas están diseñadas para fusionarse con membranas o responder a señales ambientales, permitiendo una liberación controlada dentro de un compartimento determinado. A lo largo de estos procesos, las propiedades inherentes del liposoma — tamaño, lamelacidad y composición lipídica — desempeñan un papel esencial en determinar cómo se comporta el sistema. Desde una perspectiva de diseño e investigación, factores clave incluyen el tamaño de las partículas, la carga superficial y la composición lipídica de la bicapa. Los investigadores caracterizan las cápsulas liposomales usando técnicas como dispersión de luz dinámica para evaluar la distribución del tamaño, microscopía electrónica o crioelectrónica para la morfología y mediciones de potencial zeta para la carga superficial. La estabilidad durante el almacenamiento y en diversos medios, junto con la reproducibilidad de la encapsulación y las propiedades de liberación, son consideraciones importantes en el estudio de estos sistemas vesiculares. Al examinar estos elementos, los científicos construyen una comprensión práctica de cómo funcionan las cápsulas liposomales y cómo las decisiones de formulación influyen en su comportamiento en diferentes contextos experimentales.