Descubra fuentes naturales de magnesio y los mejores alimentos que contienen este mineral. Esta página se centra en las fuentes naturales de magnesio y en consejos prácticos para incorporarlas en las comidas y meriendas diarias. Al enfocarte en alimentos reales en lugar de suplementos, encontrarás diversas maneras de integrar opciones ricas en magnesio en tu rutina. Las fuentes naturales de magnesio provienen de una mezcla de alimentos de origen vegetal y animal, así como de opciones enriquecidas. Ejemplos de alimentos de origen vegetal incluyen verduras de hoja verde, almendras y otros frutos secos, semillas de calabaza y sésamo, frijoles y lentejas, avena y otros cereales integrales. Las opciones de origen animal y otras pueden incluir ciertos mariscos y productos lácteos. Revisar etiquetas o información nutricional puede ayudar a identificar los artículos considerados fuentes naturales de magnesio. Consejos sencillos para incorporar fuentes naturales de magnesio en tu día: planifica las comidas alrededor de un ingrediente que contenga magnesio, añade semillas al yogur o a la avena, espolvorea frutos secos en ensaladas o snacks, mezcla verduras de hoja verde en smoothies, y elige versiones integrales de pan, pasta y cereales. Sustituciones simples y ideas para preparar en batch facilitan incluir estas fuentes de forma regular. Ideas deliciosas y cantidades diarias: porciones típicas para comenzar incluyen aproximadamente 28 gramos (una onza) de frutos secos o semillas por porción, 1-2 tazas de verduras de hoja verde por comida (crudas o cocidas), 1/2 taza de frijoles o lentejas cocidos, y 1/2 taza de cereales integrales cocidos por porción. Distribuir estas porciones a lo largo de las comidas y meriendas puede sumar durante el día. Dado que las cantidades diarias pueden variar según la persona y el patrón alimentario, ajusta las porciones para que se adapten a tu rutina.